En sus tres ‘presentaciones’: miniatura, estándar o gigante, el aspecto solemne y formal de la raza Schnauzer le confieren una gracia y encanto que no para de conquistar adeptos.
Originados en las cercanías de Stuttgart, en la región de Baden Wurtemberg, tierra de espesos bosques y montañas al sur de la actual Alemania, el Schnauzer es el resultado del cruce de antiguas razas de perros utilizados por los habitantes de la zona para pastorear ganado, cazar ratas, cuidar establos, granjas y casas de potenciales amenazas.
Sus criadores alemanes definirían los rasgos característicos que conocemos hoy a mediados del siglo XIX, y a finales de esa misma centuria, cuando la moda humana era llevar barba, como la del ‘Kaiser’ Guillermo I, ya era presentado en acreditadas ferias en su tierra natal.
Velozmente la fama de excelente perro de compañía, resistente, afectuoso y sobreprotector se extendió por toda Europa, donde el can alemán era muy bien recibido gracias a su estirado porte, su pelaje áspero ‘tipo permanente’, su particular hocico barbudo y a sus expectantes ojos oscuros, que siempre brillan con severa intensidad a través de tupidas y expresivas cejas.
American dream
Las montañas del Jura y la Selva Negra nunca fueron obstáculo para la expansión europea del Schnauzer; ni tampoco lo serían los océanos del mundo. Por lo que a principios de siglo XX ya se conseguían ejemplares en los Estados Unidos, Canadá y Australia. Sin embargo, dos guerras mundiales protagonizadas por Alemania, donde también se verían involucrados nuestros amigos caninos, retardarían por casi una década su conquista de América.
El Schnauzer que se expandió por el mundo ya traía sus variantes de tamaño. Y, aunque al comienzo era catalogado en los Estados Unidos como Terrier. Todas ellas serían reconocidas aquel célebre año 1955, cuando el simpático y mesurado ‘Jock’ hizo su debut en la gran pantalla.
Ficha Técnica Básica
Aptitudes: Compañía Talla: mediana, de 45 cm a los 50 cm. Peso: de 14k a 20k. Pelaje: áspero. Longevidad: 12 años. Temperamento: cariñoso, juguetón, algo territorial ideal para niños y ancianos