Este comportamiento es más común de lo que piensas y suele ser más frecuente en la etapa de cachorro. Pero, ¿Por qué se orina? ¿Emoción? ¿Miedo? ¿Angustia?
Los perros demuestran sus estados emocionales de distintas maneras. Cuando tienen miedo o inseguridad es típico que se observe encorvado, cabizbajo, con la cola entre las piernas y emitiendo sonidos agudos como chillidos, por ejemplo.
Por otra parte, cuando están alegres suelen menear la cola, ladrar, saltar y, en ocasiones, orinarse de la emoción.
¿Qué hacer?
Ante esta magnitud de emociones sin control de esfínteres es necesario, primordialmente, que no regañes a tu mascota.
Para evitar que tu perro se orine de la emoción es importante que al llegar a casa no lo saludes con tanta efusividad. Primero espera a que se calme.
Puedes usar comandos como “sentado”, “sit” o “quieto”, “Still” para que espere; una vez haya bajado la emoción y asimilado que estas allí, puedes llamarle y acariciarlo, pero recuerda, sin tanta efusividad.
Miedo, otro factor
Si el perro fue maltratado física o psicológicamente puede que presente episodios de micción como manifiesto de sumisión o miedo.
Es importante resaltar que no debes castigar físicamente a tu mascota; los traumas pueden ser arraigados y difícilmente podría superarlos. Toda corrección debe ser con disciplina, constancia y amor.
Si los episodios son constantes y no se solucionan es importante que contactes a un especialista en comportamiento canino.