Descrito como un ‘tesoro del mar’, el vómito de ballena o ámbar gris es uno de las sustancias o elementos más preciadas por los creadores de perfumes en todo el mundo.
Durante centurias nadie supo de dónde provenía este material. Fue en el siglo XIX durante el apogeo de la caza de ballenas cuando se descubrió que procedía del carnívoro más grande el mundo, el cachalote.
Según el Museo de Historia del Reino Unido, el vómito de ballena o las heces de estas; se forma específicamente dentro de esta especie de cetáceo. El ámbar gris, un eufemismo para este desecho orgánico, fue un misterio que se mantuvo durante siglos y un fenómeno actual, relativamente.
Entre aromas y reliquias hogareñas
El vómito o heces de ballena o ámbar gris, se forma en el sistema digestivo del cachalote. Los científicos dicen que esta sustancia es una especie de protector intestinal que cubre los objetos irritantes en esta zona del mamífero; debido a que su dieta se basa en cefalópodos como calamares gigantes sepias y pulpos.
De igual manera existe información y opiniones científicas acerca de que si es cierto que el cachalote expulsa el material por la boca o como heces. Alegan que nadie ha visto esto aún y que seguirá siendo un misterio hasta que se documente.
Por otra parte, los dueños de industria de perfumes se vuelven locos con ese ingrediente mágico y todos desean tenerlo para dar ese toque sublime y enigmático a su producto.
Para que tengas una idea del porqué esta sustancia es tan polémica lee lo siguiente: un terrón o ‘roca’ de ámbar gris de 2.5 kilos puede costar $153.000 dólares y un comprador de la industria del perfume puede pagar el triple de ser necesario.
Existen casos de personas paseando por la playa con su mascota que, sin saber qué es, se topan con él, les llama la atención y se los llevan a casa a pesar del aroma; una vez descubren de qué se trata y el costo de la misma sus vidas dan un vuelco positivo. También están aquellos personajes que prefieren no venderlo y mantener su oloroso tesoro en casa.